LA ECONOMÍA ESTÚPIDA

El poder que cedes es poder que concedes, el poder que se entrega se reclama con dificultad

John Keane

Muchas carencias tuvo el debate presidencial de segunda vuelta. Vacíos notables, inconsistencia de los tiempos para preguntas y respuestas, protagonismo del dueño de la fiesta… en fin. Los mayores, la ausencia de la cultura como tema y la falta de repreguntas, vetadas quien sabe en acatamiento a qué siniestro interés. Lo cierto es que quedó abierto un boquerón por donde penetran los fantasmas de la incertidumbre, gérmenes la más de las veces del desencanto.

¿Cuántos advirtieron en 2006 el peligro de la república frente a la refundación? Hemos padecido por años la adulteración institucional que representa la astracanada de Montecristi. ¿Acaso no repugna la inoperancia, la estulticia de haber creado un bodrio como el CPCCS, dizque chaperón de la democracia participativa?  Todos esos temas pasaron enherbolados con el discurso arrogante y la sonrisa socarrona de quien gobernaría el Ecuador diez canallescos años. Curiosamente, la refundación constituyente integraba la plataforma de campaña de varios perdedores de entonces: feria de las vanidades donde nadie cede un palmo y todos trepan, impúdicos, al carro del engaño. Legitimando el absurdo si con él se infla el ego personal, que la patraña tiene valimiento cuando engrosa el corso.

CCE. Foto elcomercio.com

Endriago de aquella constituyente, cocida y condimentada en la trastienda de Carondelet, fructífera en aspavientos, propaganda, hipérboles, la cultura no trascendió de rubro marginal del presupuesto. El correato se apropió de todo tipo de manifestaciones; asumió que la cultura es el Estado; que empezaba y terminaba en las magnas directrices de sus visionarias estrategias.

El batiburrillo de muchos capitostes promocionados al efecto contribuyó al desconcierto absoluto. Entendida como comunicación, descalabró los medios incautados; las emisoras del estado, en una aventura sin gloria, despilfarraron recursos hasta la quiebra irremisible de proyectos ilusorios. Entendida como educación, alentó el currículo de adoctrinamiento revolucionario, pautado por la huella caribeña de Fidel, con textos nefastos loando hipotéticos logros del nacional-populismo. Las famosas Escuelas del milenio, las universidades faraónicas, estériles, insuficientes, inútiles para el propósito de elevar el nivel de aprendizaje, capacitar al educando, superar el abismo que nos separa del mundo del conocimiento, van camino de la implosión por el sendero de su esmirriado aporte en la vida nacional. ¡Y el libro!… “en el ángulo oscuro, /de su dueña tal vez olvidado, / silencioso y cubierto de polvo,” diría Bécquer. Las Ferias, otrora hitos culturales, devinieron mustios jardines que lejos de convocar la cultura, la ahuyentaron. Quitaron el apoyo estatal, desde su ratonil mezquindad, a las representantes editoriales que redundan siempre en el éxito de todos. Hoy es im-po-si-ble encontrar títulos relevantes en el comercio. Cerraron los fondos de Alianza Editorial, de Gredos; desaparecieron librerías. Lo recoge las crónicas: en el país es difícil publicar y se lee poco. ¡Catorce años sin mejorar los índices de lectura!

El presidente era sujeto de aparentar erudiciones e incompletas lecturas en pose doctoral, ¿de qué extrañarse?¹.     

Cultura fue otra asignación perdida por el correato. Sus ministros, sumidos entre lo vacuo y vulgar, como aquel rimbombante “Campeonato mundial del encebollado”, o cómplices de ostentosos eventos, como el Festival de Música de Loja, toboganes de su feria del sobreprecio, fueron escogidos entre la hez o las antípodas del quehacer cultural, como cifra el candidato.

Los candidatos. Foto: pichinchacomunicaciones.com.ec

Sobre economía quedaron preguntas no clarificadas. Traduzco libremente a Elena Lazarou¹, a manera de preámbulo. Para la región latinoamericana, dice la analista, “donde varios países se encuentran seriamente endeudados… algunos con limitado acceso al crédito, financiar tales políticas aparece extenuante y dejará huellas en las finanzas públicas para los años venideros… Resta por ver cómo la estanflación de la actividad económica afectará al sector informal, que alcanza en ciertas naciones una porción superior al 50% de la población.” Aclaremos que se refiere a los planes de sustentación del consumo, tales como transferencias directas y compensaciones ante el recorte de ingresos. 

El problema del incremento salarial ofrecido por el binomio de CREO resulta tan cuestionable como la entrega de dinero directamente a las familias del correísmo. La admonición es inobjetable; el dinero no surge por ciencia infusa: todo manejo dadivoso habrá de ser pagado. Para prevenirlo existen los fondos que Chile y Bolivia dispusieron, pero Ecuador dilapidó; ergo, deberemos acudir al financiamiento externo.

Los “socios chinos” (así los llama el candidato correista) saben de garantizar sus empréstitos, lesivos al interés nacional. Al perder jurisdicción sobre el hidrocarburo, ¿dónde queda el soberanismo; cómo “recuperará el futuro” sin administrar el principal recurso del estado? Los supuestos inversores que atraería una economía de reglas claras, desaparecieron de los radares societarios hace 14 años; ¿qué flauta de Hammelin pifiará Lasso para conjurar las inversiones que requiere la economía? Cuando su oferta salarial conspira contra los costos, ¿qué industrial aceptará cargos mayores en la planilla y asumirá riesgos en una economía de baja productividad? La liberalización es un atuendo llamativo que no garantiza novio ni casamiento, pero es indumentaria obligada en las fiestas del FMI.

Unas y otras líneas principales de la oferta electoral transgreden el razonable escepticismo. Equilibrados en cuanto al galimatías, en materia de dolarización, el nacional-populismo tiene mucha tela que cortar. Sus contradicciones espeluznan.

Acaso en su enfebrecida fantasía duermen los recursos con qué sostenerla cuando piensa echar mano del BCE, que custodia los caudales, contantes y sonantes, de los depositantes bancarios (7.360 MM)3. ¿Habrá cambiado de opinión respecto del congelamiento de activos que recomendaba en 2012? Convencido que ella impide la fuga de capitales, la incorporó en su plan de gobierno, donde aparece bajo el eufemismo “Cuarentena”. ¿Dónde quedó el armígero caballero que combatía la banca? En todo caso, será él, banquero bueno, que desde el estado redirigirá “la liquidez a donde requiera la economía, a través de sobregiros, títulos del BCE y dinero electrónico”. En este cuentito, los ciudadanos somos los borricos, incapaces de definir nuestra conveniencia económica. Irracionales, necesitados de su sapiente discernir que dirima, por nosotros, qué hacer con nuestro dinero.

Si la gallina lo pone y con sal se come, eso se llama “congelamiento bancario”. Nos ha creido estúpidos.

Sea cual sea el elegido, sepa que el voto de mayoría a su nombre le autoriza gobernar. Pero no recibe un cheque en blanco; no puede lesionar nuestros intereses siniestramente ni obrar a su antojo en nombre del voto. Permaneceremos vigilantes. No cuenta con unanimidad ni puede aspirar a ella; deberá respetar, siempre, a quienes, desde la otra orilla, tienen los mismos derechos. Y respetar, sobre todo, el período para el que fue electo. Esas son las reglas. 

¹ Roberto Aguilar; estadodeproganda.com; desaparecido.

² COVID-19: What will happen to Latin America’s regional economy?; Elena Lazarou; https://theglobalamericans.org/2020/04/covid-19-and-its-effect-on-latin-americas-regional-economy/

3 Boletín del BCE; Febrero 2021

Puntuación: 1 de 5.

2 comentarios en “LA ECONOMÍA ESTÚPIDA

  1. Excelente amigo.
    Me encantó tu conclusión final cuando resumes que sea cual sea el elegido no podrá actuar a su antojo. Eso es lo correcto, nosotros como pueblo tenemos la obligación de velar por lo que pueda hacer el nuevo presidente, sea quien sea. No es un tema de ideología, es un tema de bienestar general.

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    • Mil gracias por ese honroso título.
      Es muy halagüeño saber que este espacio se puede nutrir de reafirmaciones, como la tuya, que favorecen la comprensión de la democracia como queremos entenderla: el terreno de la comprensión, de la tolerancia y de la libertad.
      Este blog es tuyo. Bienvenido.

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